Sea cual sea la herramienta de monitorización que se utilice, llega un día en que hay que actualizar a la última versión. Ya sea porque la versión que se está usando llega a su fin de vida, o por obtener las mejoras que provee la nueva versión publicada.

Cada herramienta tiene su propio protocolo para realizar esta actualización, pero hay cosas que se deberían hacer siempre que se haga una actualización indistintamente de la herramienta que se utilice.

Con esta guía ofrecemos unos pasos a seguir antes, durante y después de la actualización de la herramienta de monitorización.

Lo primero de todo es elegir el momento para realizar la actualización e informar a todos los involucrados, tanto técnicos como usuarios finales, para que sepan que la monitorización sufrirá un paro mientras dure el proceso.

Actualización de la herramienta, pasos previos

La actualización de la herramienta de monitorización es un proceso importante que debe realizarse con precaución.

Una vez tenemos fecha señalada para actualizar la herramienta de monitorización, y previo aviso a los técnicos informáticos, realizaremos una copia de seguridad del servidor, si es un servidor virtual se puede realizar un ‘snapshot’. Con esto se garantiza que, si hay algún inconveniente durante el proceso de actualización, se puede regresar a la situación anterior.

El siguiente paso es tomar nota con capturas de pantalla de:

  • las alertas actuales
  • el estado general del servidor
  • la versión del sistema operativo
  • la herramienta de monitorización

También es importante deshabilitar las notificaciones para evitar el envío masivo de estas en caso de que haya algún problema durante la actualización.

Proceso de actualización

En este momento ya se puede realizar el proceso específico de actualización de la herramienta de monitorización que se esté utilizando. Para ello es aconsejable seguir las guías que ofrecen los fabricantes de estas herramientas.

Con las guías nos aseguramos de adaptar la actualización a las características de nuestra herramienta, con sus particularidades.

Una vez finalizado el proceso y la herramienta está de nuevo en marcha, hay que esperar que esta realice todos los checks de los elementos monitorizados.

Mientras se espera al check definitivo, podemos hacer algunas comprobaciones:

Tras finalizar el proceso, es importante realizar pruebas de funcionamiento para verificar que todo esté en orden. Se deben comprobar las alertas, los logs, los plugins y las integraciones, y asegurarse de que las alertas que había antes de la actualización sigan existiendo.

  • Comprobar la versión de la herramienta de monitorización.
  • Revisar los logs en busca del algún error durante el proceso de actualización.
  • Revisar el funcionamiento de la herramienta añadiendo, modificando y eliminando un elemento.
  • Realizar un envío de una notificación.
  • Comprobar que los plugin propios funcionen correctamente.
  • Comprobar que las integraciones funcionen correctamente.

Finalmente, comprobamos que las alertas que hay es la herramienta son las mismas que había antes de la actualización y que el estado del servidor es correcto.

Si todo está en orden, se pueden volver a habilitar las notificaciones que había antes de la actualización y, pasadas unas horas, se puede eliminar la copia de seguridad o el ‘snapshot’.

Esperamos que con estos consejos, los departamentos de SI puedan actualizar la herramienta de monitorización, se haga de manera efectiva y garantice un sistema informático seguro y eficiente.

Recordamos que la herramienta de monitorización es una pieza clave en la gestión de sistemas informáticos y redes de computadoras. Mantenerla actualizada es importante para garantizar el correcto funcionamiento del sistema.